Ingredientes
150 gr de quinoa negra.
1 tomate grande.
1 pera.
4 rabanitos.
1 remolacha cruda.
1/2 calabacín.
40 gr de avellanas tostadas.
Sal
Aliño:
2 c/s de AOVE
1 c/s de aceite de sésamo.
1/2 c/s de salsa de soja.
1/2 c/s de mostaza.
1/2 c/s de miel.
1 c/s de vinagre de módena.
Sal.
Preparación
Lavar la quinoa debajo del grifo con agua fría, frotando con los dedos hasta que el agua salga transparente.
Poner la quinoa en una cazuela tapada con 210 ml de agua fría con sal (volumen de agua 1,4 respecto al peso de la quinoa) y cocerla durante 14 minutos desde que empieza a hervir. De esta forma quedará seca como un arroz y no se abrirá el grano. Pasarla por agua fría, dejar que se escurra bien y luego extenderla sobre un paño limpio para que se seque.
Cortar el tomate y el calabacín en cubos pequeños de un tamaño similar.
Hacer bastones con la pera pelada y descorazonada.
Con los rabanitos y la remolacha pelada, hacer rodajas finas.
Juntar todos los ingredientes de la ensalada en un bol.
Mezclar en un tarro de cristal todos los ingredientes del aliño (cuidado con la sal porque la soja ya le aporta su punto salino), agitarlo bien para que emulsione y verterlo sobre la ensalada. Mezclar bien y servir.